Empezó la demolición. Ahí están los muchachos, bajándole los dientes a los techos. Esa casita, que andá a saber hace cuántos años está, dejará de estar. Arrancaron tempranito, los muchachos, con la masa. No me animé a mirar la hora, en la oscuridad, pero no eran las 9, seguro. A partir de las 12, dejaron de hacer ruido. ¿No da que les reorganicemos la agenda?
si te ponen un telo al lado, ya está. tu vida se completa. alegrate que por ahora es tan sólo una obra en construcción.
ResponderEliminarTe cambio tres telos por mi edificio. No veo bien la razón por la cual puedan resultar tan nocivos. Ni ahí, al menos, comparado con un edificio. Salvo, claro, un telo de ocho pisos. Pero ahí el tema no sería el telo. De hecho, ahora que pienso... andá a saber si no es un telo de ocho pisos, lo que pondrán acá enfrente. Andá a saber...
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